🌖 Tributo a Siritinga

Artículo publicado en la web: http://dreamers.com/hiperesp/Artics/siritinga/sirit.html

Escrito por Virginia García

Siempre nos hemos quejado de las pocas "movidas" de género fantástico que genera España. Tenemos unas cuantas Hispacones, algunas reuniones de grupos como el Estrella Negra de Babylon 5 y las Hispatrek que se hacen cada año. Pero siempre lo mismo: no había más actividades que las que los fans preparaban, y además siempre se nos miró desde los medios como auténticos fenómenos de feria. Pero eso va a cambiar, porque desde una radio estatal (Radio 3 para más señas), se lleva emitiendo desde hace tiempo una curiosa radionovela de ciencia-ficción. Bebe de todas las fuentes imaginables (Dune de Frank Herbert me viene mucho a la mente, con una suave mezcla de diálogos chispeantes dignos de Star Wars, aparte de que Juan y Tula han ido valientemente donde nadie ha ido jamás, como en Star Trek...), y se está metiendo en el bolsillo a muchos que no estaban por el género en cuestión. Además este invento es bastante multimedia, ya que los oyentes "crean" partes de Siritinga por medio de los "cromos visuales y auditivos" que envían a la redacción del programa. Y esta es la manera en que comienzan las aventuras de...

Cuando Juan y Tula fueron a Siritinga

(Turismo peligroso)

Por Ainigriv Aicrag de la casa de Ziur

Tal y como lo contó el OjO

Sequía pertinaz

No me refiero a la cartelera cinematográfica en cuestión de calidad, sino a la sequía de Fluido Carmesí que se sufre en Siritinga. Este planeta gira alrededor de una estrella enferma: el sol de Pantar, y eso precisamente es lo que permite la vida allí. La cual no es precisamente fácil: las dos razas de habitantes se llevan a matar. Se pelean por el fluido, por las joyas, por todo, vamos. Por un lado, los Tingar, que son un pueblo muy ambicioso (y son muy suyos), y los Viborx, que además de ser también muy suyos, pues son además, feos como el pecado (solo puedo decir que hay tentáculos y pelos implicados...¡Eghs!). Tras una revuelta la mar de violenta, El-Jormaz de Saralham, un guerrero mercenario ariesano de tres metros de alzada, dio con la clave de la paz. A partir de entonces, Viborx y Tingar tendrán que hacer intercambios comerciales con el preciado Fluido Carmesí (algo así como si fuese oro prensado latino para un ferengi en Star Trek), pero nadie tendrá más poder que otro, ya que El-Jormaz, listo él, inventó un convenio económico conocido con el nombre de los Códigos de Laris, Arenas y SaucoGris. Este convenio es difícil de romper, ya que la llave de los códigos se dividió en tres: una parte es de los Viborx, otra de los Tingar y la tercera para el ariesano, que se reserva el título de comisario de policía en el Desfiladero de Siritinga, la yugular del planeta, para que ni lo unos ni los otros se desmanden.

Todo iba bien, hasta que las vetas de Fluido empezaron a bajar de nivel. Asustados, los Tingar llamaron a Juan de Olarcos, de profesión zahorí, para que averigüe a dónde porras ha ido a parar todo el valioso líquido. Con ayuda de su inseparable compañera Tula de Salquarin, una mujer chacal con la que comunica telepáticamente, enfilarán hacia Siritinga. Un lugar peligroso donde nadie se fía de nadie, y todos quieren ser califa en lugar de califa...

Corrupción en Siritinga (que no en Miami)

La llegada de Juan y Tula es usada como un instrumento usado por las diferentes facciones como una pelota de ping-pong en su escalada de ambición.

Por un lado está Moona Tirrel: la princesa Tingar más hermosa y más ninfómana que jamás se haya visto. Pero no es una pendona normal, la verdad. Esta jovencita sufre curiosos cambios hormonales con los cambios de estación: en realidad, se transforma en hombre. Y hay más de dieciocho estaciones anuales en Siritinga, así que pasará, como mínimo, nueve como Moona y otro tanto como el viril príncipe Monatir. Por lo que se podría decir que el ropero de Su Alteza real es el doble de grande que el de cualquier otra Alteza del universo...

Su "encantador" hermanastro, traidor y prisionero político en fuga, sufre de los mismos cambios que Moona, pero en sentido inverso (buscad una detonante pelirroja que responde al nombre de Tana Leri con voz muy "sospechosa"). Y nos tememos que de vez en cuando hayan compartido el tálamo principesco como amantes, aunque ahora Moona sea un estorbo en las ambiciones de su hermanastro/a. Estos dos dejarían a los viciosos Harkonnen de Dune reducidos a virginiales colegialas...

No nos podríamos olvidar de los otros ángulos de esta historia: Flivia Shagorna, la (horrorosa) anciana reina y líder de los Viborx, que a su vez, es también otra de las numerosas amantes de la Tirrel (supongo que tanto de hombre como de mujer... ¿Nunca tiene bastante?), que tampoco se fía un pelo de nadie, o incluso el mismo El-Jormaz, que oculta cosas importantes a nuestros protagonistas...

Y por último, el alivio cómico de la serie: los narradores. Se metieron tanto en la historia, que ahora están dentro de Siritinga, y no pueden salir. Están atrapados en un partido de fútbol infernal, y vete a saber si no recibirán algún pelotazo...

¿Podrán Juan y Tula descubrir qué pasa con el Fluido carmesí? ¿Qué necesita la Tirrel para ser feliz? Y ¿Qué esconderá el ariesano de Saralham? Algunas voces invitadas en los próximos capítulos indican la presencia de gente como Andrés Aberasturi (el famoso periodista). ¿La solución? Proximamente en vuestros aparatos de radio, amiguetes...

Cuando Juan y Tula fueron a Siritinga se emite en Radio 3 de Radio Nacional de España los lunes, miércoles y viernes a las 3:50 de la madrugada (especial noctámbulos), a las 7:50 de la mañana (para empezar el día con energía), a las 11:50 (para dormilones) y a las 19:50 de la tarde para los últimos en llegar.

NOTA: A causa de la falta de espacio, las imágenes originales que hicieron los fans han sido vilmente mutiladas por mí. Pido humildemente mil perdones a los autores, que poseen todos sus derechos. Si queréis ver tanto las imágenes como los nombres de los fans que las crearon, podéis hacerlo en la GALERÍA de la web de Siritinga, http://www.rtve.es/rne/siritinga/intro.html ....